Tras la introducción de rebaños en los viñedos como práctica de viticultura regenerativa, Familia Torres extiende ahora el pastoreo con animales domesticados a sus fincas forestales en Catalunya para mantener limpios los bosques y gestionarlos desde un enfoque holístico. Esta práctica agroforestal denominada ‘silvopastoreo’ (en latín, silva significa bosque) busca beneficiar tanto a la tierra como a los animales, aportando materia orgánica para el suelo y un entorno fresco y con sombra para el ganado, a la vez que sirve de mecanismo de prevención de incendios.

Familia Torres, que cuenta con más de 1.800 hectáreas de bosque en Catalunya, está introduciendo el silvopastoreo en sus tierras situadas en el Alt Camp, Conca de Barberà y Alt Penedès gracias a acuerdos con pastores y asociaciones. A partir de ahora, los rebaños, que solo habían pastado puntualmente fuera del viñedo, se introducirán de forma planificada en zonas boscosas de las fincas. En su finca de montaña de la comarca del Alt Camp, colabora desde el mes de junio con una pastora de cabras y, en los próximos meses, introducirá otro rebaño caprino externo en sus bosques de la Conca de Barberà.

La bodega familiar también colabora con Forest Horses, asociación dedicada a la restauración de bosques mediante el pastoreo con caballos, para introducir un grupo de caballos en una finca que posee en la comarca del Alt Penedès. Durante estos meses, se está adecuando la zona con la instalación de cercados y abrevadores que necesitarán los animales cuando lleguen en trashumancia a la finca el próximo otoño.  

El caballo es un gran herbívoro gregario que pasta durante la mayor parte del día y vive en manada. Pueden recorrer largas distancias mientras pastan, esto hace que a su paso remuevan la tierra y con sus heces vayan esparciendo las semillas que van ingiriendo, ayudando a desarrollar la biodiversidad a la vez que potencian una limpieza sostenible del monte. Además, en el bosque los équidos contribuyen en la prevención de incendios, abriendo caminos que actúan de cortafuegos naturales, por zonas intransitables para el humano. Por eso, desde la asociación, se ha apodado a los animales como “caballos bombero”.

Con la introducción del pastoreo con animales, Familia Torres refuerza la gestión sostenible de los bosques que se encuentran cerca sus viñedos y que tiene en propiedad para proteger los espacios naturales y la biodiversidad. Estos incluyen los proyectos de reforestación que lleva a cabo la bodega en Catalunya para absorber CO2 atmosférico, contribuyendo así a mitigar los efectos del calentamiento global. La bodega familiar conserva estos paisajes boscosos, con especial atención a la prevención de incendios, a través de Planes técnicos de gestión de mejora forestal (PTGMF) y actuaciones silvícolas puntuales en las diferentes fincas como aclareos de bosque, talas selectivas y podas de formación, entre otras.